Las lluvias de la semana pasada asentaron la tierra del huerto y la dejaron algo más pesada, perfecta para poderla labrar sin levantar polvo. Así que este fin de semana he pasado el motocultor a un pequeño bancal de algo más de 200 metros cuadrados, en los que hoy he plantado acelgas, espinacas, rábanos, zanahorias, cebollas, lechugas y perejil.
Con todo lo sembrado no he cubierto ni la mitad de lo labrado, así que me estoy planteado esperar unos días y volver a sembrar de nuevo en este espacio libre las mismas verduras, para escalonar un poco la producción.
Mientras tanto los pimientos de padrón no dejan de florecer y de dar frutos. Cuanto más les quito, más producen.
Mientras tanto los pimientos de padrón no dejan de florecer y de dar frutos. Cuanto más les quito, más producen.
Como adelanto de lo que espero sea un magnifico otoño de setas, he encontrado estos botones de agrocibe, que para finales de esta semana van a terminar fritos con ajos y jamón. Será cuestión de ir viendo si han salido ya las setas de cardo, mientras que espero a los niscalos, pinochillas, agaricus, boletus, colmenillas ...